El Sindicato de los Yesistas.

En la Habana, "El Sindicato de los Yesistas"  fue ( o es) un local  ubicado en  Xifré, entre Maloja y Estrella . Cuando escucho historias de situaciones que ahí se vivieron, siempre imagino a un grupo de yesistas tocando Jazz. Pero no, al menos no he llegado a ninguna historia que comience o termine así.

Los "yesistas" son las personas que ponen yeso. Pero cuando hablamos del Síndicato de los Yesistas de la vieja Habana, hablamos de artistas que creaban figuras de yeso para darle vida a los espacios muertos en casas, edificios y salones.  

Los artistas yesistas son una especie en vías de extinción, se están acabando. Se acaban porque ahora, para quien guste, existen molduras hechas por cientos, con una limitada cantidad de modelos, que son muy similares a las tradicionales. Pero entre las molduras y los artistas, se esta acabando también el gusto por hacer algo con la nada y eso es grave.

La nada es única. Es inicio y es fin. Es tragedia y es ilusión. Es tan fuerte que puede acabar con todo y esta lista en cualquier momento para comenzar de nuevo.

La nada no tiene equivalente ni sinónimo, es poesía perfecta. 
Si nadie hace algo con la nada, deseo que la nada venga y haga algo con todos.
  
Prometo solemnemente no volver a llamarle "nada" a las cosas  sin importancia. No lo merecen.

En el Sindicato de los Yesistas  se presento alguna vez "El Gaucho del Misterio", cantante de tango enmascarado  que en su vida alternativa era conductor de autobús y fotógrafo. Pero esa es otra historia.


P.d. Hay que cambiar el diseño de este blog.

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